La Educación Holística, una visión de educación integral

La implementación del modelo de educación holística sugiere la compenetración permanente entre formación académica y humana. La consolidación de una estructura de educación integral persigue la vinculación plena de ambos campos del aprendizaje. Sin embargo, y por el momento, las normas educativas proponen un currículo definido que se debe respetar y cumplir en la escuela.

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“Educar para la vida” se ha vuelto una frase repetida en muchos centros educativos. La disciplina y la infraestructura de los centros educativos han sido valorados como indicadores de la calidad en la enseñanza. Desde el Modelo de Educación Holística se defiende una educación integral, que trasciende el aula e involucra la vivencia de valores.

El educador mexicano David Casares considera que la “principal crisis que vive nuestra época es la valores, de orientación y de actitudes ante la vida”. En su libro “líderes y educadores: el maestro, creador de una nueva sociedad” evalúa la crisis educativa en México y en gran parte del continente.

Casares reclama un nuevo enfoque para el desempeño educativo. La importancia de las pruebas de evaluación de rendimiento que se aplican a nivel mundial, como el PISA, han desvirtuado las políticas de enseñanza. Las políticas educativas enfatizan el esfuerzo por mejorar los indicadores de medición antes que enfocarse en mejorar la calidad educativa en su generalidad. Este desempeño insiste en el aprendizaje académico como paso único para mejorar la educación.

El modelo de educación holística fusiona la formación humana y la generación de experiencias de vida en un mismo esfuerzo educativo. El holismo sintetiza la idea de todo, íntegro, completo. El calificativo de holístico referido al sistema educativo proyecta la intención de integrar todas las dimensiones del ser humano en un proceso de enseñanza real.

Para Rosa Isela Gluyas y otros expertos en educación del Tecnológico de Monterrey (México), el cambio hacia un sistema de formación educativa holística “impulsa una mejora en el desarrollo de la sociedad”. El modelo educativo mantiene el énfasis por la enseñanza académica de contenidos curriculares para complementarla con una visión integral de la persona y del mundo. La formación holística, reafirma Gluyas, integra los saberes en un proceso que fija su sentido en el estudiante. Bajo esta propuesta, el estudiante consolida un saber ser, a partir del autoconocimiento, que se proyecta al saber conocer, que alienta el aprendizaje continuo, como paso previo al saber hacer, desde la perspectiva de un compromiso con la sociedad y el medioambiente. El aprendizaje se diseña desde la persona y sus necesidades principales como la formación del carácter, la identidad, el sentido de la vida y el valor de la convivencia.

El sustento argumental del modelo de educación holístico parte de la defensa del ser humano como un ser multidimensional. La educación moderna asume esta realidad del estudiante y renueva sus sistemas de enseñanza para abarcar las diversas dimensiones que componen la realidad y personalidad del estudiante. La formación holística es, por tanto, un modelo de educación humanista, pues centra su interés en el crecimiento integral del estudiante, atendiendo todas las dimensiones propias de la persona.

El sistema educativo actual se ha construido sobre un conjunto de afirmaciones no demostradas. Los programas de trabajo en aula se centran en impartir un conjunto de conocimientos académicos predeterminados. David Casares considera que los diseños curriculares han dado por hecho que los estudiantes “ya tienen desarrolladas sus habilidades básicas, personales y sociales, así como sus actitudes vitales, la autoestima y el compromiso con la superación continua”. Se han olvidado de formar a las personas en su dimensión humana.

La práctica habitual ha centrado la educación en la enseñanza del contenido curricular. El estudiante se gradúa con una cartilla de conocimiento académico adquirido. Al afrontar la vida laboral y social, enfrente múltiples conflictos para los cuales no ha tenido “entrenamiento” escolar. Debe iniciar una nueva etapa de aprendizaje para la vida.

La educación holística considera que el fomento de valores y actitudes, las competencias de sociabilidad del estudiante deben ser también parte de esa curricula que gradúe al estudiante al completar su formación. Los valores y las actitudes se forjan en las vivencias. La escuela está diseñada como el espacio idóneo para impulsar estas experiencias en entornos controlados.

La implementación del modelo de educación holística sugiere la compenetración permanente entre formación académica y humana. La consolidación de una estructura de educación integral persigue la vinculación plena de ambos campos del aprendizaje. Sin embargo, y por el momento, las normas educativas proponen un currículo definido que se debe respetar y cumplir en la escuela. La práctica actual propone un complemento cocurricular para fortalecer la enseñanza de la academia.

Al igual que Casares, Rosa Gluyas propone un modelo de educación que atienda la búsqueda de identidad personal que reclaman los estudiantes. Para ello, sugiere la complementación de las actividades de aula con otras que promuevan el desarrollo y bienestar de la persona y la comunidad. Expuesto de otra manera, la escuela debe integrar el conocimiento para que sirva a los estudiantes a construir sociedad, a resolver problemas reales en contextos de convivencia mutua.

La integración de conocimientos y saberes persigue como meta la formación multidimensional. De esta manera, el estudiante afronta la realidad cotidiana en su plenitud y resuelve los problemas cotidianos, de convivencia, relación y crecimiento, con una consistencia de saber y valor.

CLAVES DEL MODELO DE EDUCACIÓN HOLÍSTICA El informe planteado por Rosa Isela Gluyas, con respaldo del Tecnológico de Monterrey, propone 4 ejes centrales para la educación integradora. La educación centrada en los saberes, como propone el informe Delors, asume la vida como la base del saber. De esta forma, vivir es convivir, involucra a la comunidad como el entorno natural del desarrollo y crecimiento del estudiante. La comunidad se expresa a través de una identidad que edifica un proyecto de vida en sociedad. 1.    Búsqueda de sentido.- impulsar dinámicas y actividades que ayuden al estudiante a fortalecer su autoestima y cultivar una actitud de superación y desarrollo personal 2.    Convivencia.- centra su objetivo en forjar un sentido de comunidad y convivencia con los demás. Se trabajan las actitudes de recibir y ofrecer en un marco de respeto y tolerancia. 3.    Cultura.- acercamiento a las manifestaciones culturales de la comunidad generado por el ánimo de conocer y apreciar la identidad de los pueblos. El respeto por el arte y la cultura se asientan en un conocimiento del contexto global y la identidad propia. 4.    Situación social, política y económica.- descubrir el entorno social, político y económico que nos rodea. El compromiso de vida convierte al estudiante en un agente de cambio para mejorar y transformar los contextos de convivencia.

LAS DIMENSIONES DEL MODELO HOLÍSTICO 1.    Dimensión personal.- se centra el en crecimiento de la persona. En educación ocupa la primera etapa del desarrollo. Parte de la conexión cuerpo y mente para avanzar en el conocimiento académico, el desarrollo físico y el crecimiento espiritual. Estas tres dimensiones forman la base del desarrollo humano. En esta fase inicial se aprende a ser persona y a cultivar las actitudes de autoconocimiento y autogestión. 2.    Dimensión intrapersonal.- parte de la interacción del estudiante con sus compañeros. Integra la formación cívica y social. Se manifiesta en actitudes de respeto y tolerancia ante los demás y ante lo diverso. En esta etapa intermedia se forjan los valores de la convivencia y el compromiso social y ciudadano. 3.    Dimensión ecológica.- explora la relación del estudiante con el entorno, los derechos de las personas y el respeto al medioambiente. La clave de interpretación se traza a partir de la sustentabilidad. La dimensión ecológica proyecta un enfoque transdisciplinar.

Fuente: Redacción "Diálogo Educativo"

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